La noche ya no es oscura, siempre estará encendida

Por Eugenia Perrella

La naturaleza es tan amplia y misteriosa que al empezar a investigar temas para este libro la lista era casi infinita. Pero de a poco, con pistas que iban apareciendo en el camino, la magia de la noche comenzó su propia estrategia. En cada búsqueda, cada línea, cada lectura, se hacía más presente. Mostraba su fuerza, quería ser descubierta. 

Así, en vez de apagarse las luces que hacen que todo parezca dormido, comenzaron a encenderse con tanta intensidad los brillos de la noche que ya fue imposible no mirarlos. Me sumergí en su mundo e intenté descubrir, casi como quien abre una puerta y enciende una luz, algunos de sus misterios. 

Me encontré con historias que destellan y explotan de color. De eso se trata Espía la noche, de descubrir lo que podemos ver y lo que no, de encender cada rincón maravilloso y hacer que las noches nunca más vuelvan a estar apagadas. 

Primeras ideas para el formato de Espía la noche

Si quieres saber más y más, aquí te dejo algunos otros datos que me encontré en esta aventura. Algunos destellan en la oscuridad y otros no tanto, aunque igual son interesantes. Te propongo que sigas investigando, hay muchos misterios por descubrir.

• En tiempos muy remotos, cuando nada se sabía de las estrellas, se creía que eran bolas de fuego encendidas por los dioses. Muchas creencias y leyendas se inspiraron en ellas. 
• Las constelaciones son dibujos imaginarios formados por las estrellas. Antiguamente ayudaban a navegantes a ubicar su rumbo. Hay 88 en total y las más conocidas son Osa Mayor, Osa Menor, Orión, Cruz del Sur.

• La misión espacial Apolo 11 llegó a la Luna el 20 de julio de 1969. Tardó tres días en llegar y otros tres en regresar. El primer astronauta en pisar la superficie lunar fue Neil Armstrong. Lo siguieron Edwin Aldrin y Mike Collins.

• La Luna tiene poca gravedad con respecto a nuestro planeta. Para que lo entiendas mejor: si un niño o niña pesa 20 kilos en la Tierra, en la Luna pesaría poco más de tres.

• Los océanos se formaron hace unos 400 millones de años y ocupan un 70 por ciento de la superficie total del planeta. Una muy pequeña parte del agua es dulce: una porción está congelada en los Polos y otra forma ríos y lagos.
• En los océanos viven cerca de un millón de especies diferentes, pero se cree que sólo se conoce una tercera parte de la vida submarina.
• El calentamiento global está haciendo que el nivel de los mares se eleve por el derretimiento de los glaciares. También sube la temperatura del agua. Eso provocaría que varias zonas costeras no puedan ser habitadas en un futuro y que las especies marinas comiencen a migrar.
• También, se calcula que hay más de 150 millones de toneladas de plástico en el océano. Y se teme que si no se cambia la situación, en el año 2050 podría haber más plásticos que peces en el océano.

• Animales, aves, insectos conviven en las selvas y bosques. Miles de especies de plantas y árboles crecen para generar la cuarta parte de oxígeno que existe en el mundo. Además, absorben y eliminan más de dos toneladas del dióxido de carbono que hay en la atmósfera.
• Más de la mitad de las selvas y bosques son tropicales. Están ubicadas a lo largo del Ecuador, entre en Trópico de Cáncer y el Trópico de Capricornio. Hay selvas en el Congo, Madagascar, Argentina, Colombia, Costa Rica, México, Guatemala y Nueva Guinea, entre otros países. 
• Las selvas y bosques sufren incendios que, junto con la tala de árboles, provocan la deforestación. Se ha perdido una gran parte de la vegetación natural y miles de animales y se han quedado sin hogar. Es por eso que la capacidad de absorber dióxido de carbono es mucho menor y, al quedar esos gases en el aire, se acelera el cambio climático. También se generan modificaciones en los suelos y en el crecimiento de los árboles, ya que llueve menos y hay sequías. Es importante que entre todos ayudemos a salvar a las selvas y bosques para que sigan siendo una fuente de alimentos y equilibren el medio ambiente.

• Al dormirnos, soñamos varias veces, aunque es probable que ni siquiera lo recordemos al despertar. Algunos personajes célebres lograron sus descubrimientos o creaciones después de haberlos soñado. El científico Albert Einstein se imaginaba cabalgando en un rayo de luz hasta en sueños. El cantante y compositor Paul McCartney soñó con la melodía de Yesterday antes de escribirla. Y lo mismo le ocurrió a John Lennon con el tema Dream.